Descripción
Detalles
Aunque canónicamente José Moreno Villa (1887-1955) pertenece a la llamada generación del 14 la de Ortega o Eugenio D'Ors- en verdad casi todo el mundo lo relaciona con la generación del 27, entre cuyos miembros estaban sus amigos más cercanos y en cuyo entorno vivió, pues casi desde su fundación, el malagueño Moreno V
Esta obra es precisamente una autobiografía y no un libro de memorias. La diferencia entre estos dos conceptos se entiende gracias al mismo Moreno Villa. En Vida en claro el orden cronológico de los acontecimientos en la vida del autor está ausente y presente al mismo tiempo. Pocas veces Moreno Villa pone fechas a los sucesos. En el libro vemos su vida organizada más bien por sus etapas principales, entrelazadas una con otra por algunos temas, como el amor, por ejemplo. También sirven de enlace los capítulos aparte, como, por ejemplo, el capítulo VII, “Intermedio de las fechas”, en el que habla de la presencia de supersticion en su vida, una especie de magia de los números que de algún modo la marcaron; el capítulo VIII, “De la mano de las musas”, donde explica por quienes fue inluenciada su obra y sus intereses artísticos; el capítulo XVI, “Repercusión de las circunstancias”, en el cual explica su poesía: en qué se inspiró, de qué trata, qué formas literarias utiliza y por qué. En mi opinión, estos capitulos resultan fundamentales para poder diferenciar entre una autobiografía y un libro de memorias y concluir que Vida en claro corresponde al primer concepto.
Siendo una autobiografía, el libro abarca diferentes periodos históricos que sirvieron de contexto para formación de personalidad de José Moreno Villa y su obra. Nacido en 1887, el autor creció entre poemas de Bécquer y Núñez de Arce. El primero, por influencia de su madre y el segundo, por la de su padre. La etapa en que Moreno Villa vivía con sus padres parece ser la más tranquíla de su vida. Si tuvieramos que describirla en colores, pordríamos hacerlo en los tonos más claros, los colores del mar y del sol. En Málaga vivía rodeado de este ambiente marino y veraniego. Desde que era niño, a José Moreno Villa le gustaron la cancion tradicional andaluza, cuyo sonido profundo y fuerte se reflejó indudablemente en las almas de los mejores poetas españoles de Bécquer a Lorca. El joven José admiraba las experiencias poeticas de Manuel Machado, quien compuso a su modo coplas andaluzas, y también trabajó en esta corriente durante un tiempo.