Diccionario biográfico y bibliográfico de calígrafos españoles

Tomos I y II
Emilio Cotarelo y Mori (Vega de Ribadeo, Asturias 1857-Madrid 1936) fue secretario de la Real Academia Española. Su incansable y magnifica investigación erudita ayudó a puntualizar numerosos datos biográficos y bibliográficos de nuestra historia literaria.
La historia del arte de escribir, fuente de toda cultura, ofrece el interés que es notorio, pues, gracias a ella, pudo llegarse a la interpretación y lectura de los textos gráficos de todas épocas, y ensanchar así el exacto conocimiento del pasado de los pueblos.
Mucha paciencia, mucho trabajo y muchas inteligencias se emplearon en esta labor; que todo fue necesario ante la inmensa variedad con que los hombres trazaron los caracteres en que sus ideas habían de tomar forma perdurable.

Aun contrayéndonos a España, no fue poco lo que dio que entender el estudio y comprensión de las obras de un arte libérrimo y errabundo, en el que cada cual se creyó en el caso de proceder como la acomodaba, y cada vez peor, hasta que unos hombres modestos, pero llenos de constancia y energía, pudieron contener aquel desbarajuste y encauzar nuestra escritura por senda que, proseguida con gloria, Todavía hoy imprime cierto sello de originalidad y aire nacional a nuestra letra. Estos fueron los Calígrafos, y de ellos trata especialmente el presente libro. Edición facsímil de la de 1913.

Diccionario biográfico y bibliográfico de calígrafos españoles

Tomos I y II
2004
Tomo I: 342 y Tomo II: 445
17 x 24 x 6 cm
Tapa blanda
978-84-7522-905-8
48,00 €
Emilio Cotarelo y Mori (Vega de Ribadeo, Asturias 1857-Madrid 1936) fue secretario de la Real Academia Española. Su incansable y magnifica investigación erudita ayudó a puntualizar numerosos datos biográficos y bibliográficos de nuestra historia literaria. La historia del arte de escribir, fuente de toda cultura, ofrece el interés que es...
Emilio Cotarelo y Mori (Vega de Ribadeo, Asturias 1857-Madrid 1936) fue secretario de la Real Academia Española. Su incansable y magnifica investigación erudita ayudó a puntualizar numerosos datos biográficos y bibliográficos de nuestra historia literaria.
La historia del arte de escribir, fuente de toda cultura, ofrece el interés que es notorio, pues, gracias a ella, pudo llegarse a la interpretación y lectura de los textos gráficos de todas épocas, y ensanchar así el exacto conocimiento del pasado de los pueblos.
Mucha paciencia, mucho trabajo y muchas inteligencias se emplearon en esta labor; que todo fue necesario ante la inmensa variedad con que los hombres trazaron los caracteres en que sus ideas habían de tomar forma perdurable.

Aun contrayéndonos a España, no fue poco lo que dio que entender el estudio y comprensión de las obras de un arte libérrimo y errabundo, en el que cada cual se creyó en el caso de proceder como la acomodaba, y cada vez peor, hasta que unos hombres modestos, pero llenos de constancia y energía, pudieron contener aquel desbarajuste y encauzar nuestra escritura por senda que, proseguida con gloria, Todavía hoy imprime cierto sello de originalidad y aire nacional a nuestra letra. Estos fueron los Calígrafos, y de ellos trata especialmente el presente libro. Edición facsímil de la de 1913.

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